La influencia positiva de los gatos en nuestra rutina diaria

Los gatos son animales simplemente extraordinarios y su compañía es un privilegio, puede hacer tu vida más feliz. La razón es que la convivencia con un minino tiene una influencia muy positiva, la cual se refleja en variados beneficios, tanto a nivel físico como psicológico. Conoce cada uno de ellos a continuación, te sorprenderá todo lo que un pequeño minino puede hacer por ti.

Transmiten calma

Los gatos se caracterizan por ser animales muy tranquilos y silenciosos. Adoran hacer siestas durante el día o simplemente descansar sobre un sofá o alguno de sus lugares favoritos. Esto sin duda resulta beneficioso, un gato es capaz de transmitir esa calma y sosiego a quienes comparten la vida con él.

Combaten los nervios y el estrés

El ronroneo de los gatos tiene un poder asombroso. Diversos estudios científicos han confirmado que es capaz de producir calma y reducir el estrés. Al respecto, el ronroneo felino genera vibraciones de entre 20 y 140 hercios. Incluso, esta frecuencia ofrece excelentes beneficios durante el tratamiento de distintas enfermedades.

Sirven de apoyo a la salud mental

La compañía de un minino genera tranquilidad y calma, es capaz de disminuir el nivel de estrés en distintas situaciones. Por ello los gatos son una gran compañía emocional, incluso, son un apoyo para quienes padecen de depresión. Por ejemplo, mantenerse al tanto de sus movimientos, atender sus necesidades e interactuar con ellos, ayuda a que los momentos complicados sean más fáciles de superar.

Ponen fin a la soledad

Un gato es una compañía estupenda, puede convertirse en un gran amigo, un pequeño ser que está siempre ahí para ofrecer cariño y amor incondicional. Quienes viven junto a su gato nunca tienen que preocuparse por la soledad. De hecho, muchas personas consideran que tener un minino en sus vidas es la mejor terapia.

Reducen el riesgo de problemas cardiovasculares

Debido a que los gatos reducen el estrés, calman los nervios e incitan a la calma, también son buenos para el corazón. Estudios científicos han revelado que las personas que viven con un gato presentan menor riesgo de sufrir un ataque cardíaco. 

Disminuyen el asma y las alergias

Los gatos reducen las probabilidades de que los niños se vean afectados por asma y alergias. Esto se debe a que los pequeños se mantienen expuestos a los alérgenos de los felinos y gracias a ello, se vuelven más tolerantes a nivel inmunológico.

Producen alegría y felicidad

Los felinos tienen todo para subir el ánimo de cualquier persona, gracias a su naturaleza curiosa y juguetona. Con tan solo observarlos durante un rato, ya es garantía de disfrute y diversión, todas sus travesuras y acrobacias pueden robarse muchas sonrisas.

Ayudan a estar en forma

Mantenerse al pendiente de un gato y cuidarle a diario, ayuda a mantenerse activo y con ello, a cuidar el estado físico. Un gato siempre puede contagiar su energía e incentivar a estar en movimiento. En resumen, vivir junto a un minino es una de las decisiones más inteligentes y beneficiosas. Dale amor a un gatico y recibirás a cambio más amor, salud y bienestar.