¿Cómo entender el lenguaje corporal de los gatos?
Seguramente tu gato tiene a veces comportamientos extraños, o suele hacer cosas que son realmente sorprendentes y no sabes por qué. Al igual que nosotros, los gatos comunican o transmiten sus emociones a través del lenguaje corporal. Por ello, si están asustados, felices, curiosos, alertas, molestos, podemos ver cómo sus cuerpos toman posturas distintas.
Es muy importante prestar atención a estos comportamientos, en conjunto, pueden decirnos algo. Por ejemplo, si tu gato esta enfermo, o hay algo que le causa incomodidad frecuentemente. Pero primero, debemos entender que significa cada conducta y cada señal. Debemos fijarnos en su caminar, en sus ojos, en su cola, en su boca y su pelaje, así como en su tronco.
Ten en cuenta que cada gato es único y su personalidad afecta directamente en las conductas. Es muy difícil generalizar esto para todos los gatos, por lo que puede que el lenguaje corporal del tuyo sea diferente. Estas tres actitudes engloban a casi cualquier emoción que pueda sentir tu gato:
El lenguaje corporal en un gato molesto o irritado
Quizá es una de las conductas más evidentes, pero dependiendo del gato puede ser confusa. Principalmente, el cuerpo arqueado y los pelos de punta son un indicio de ello. También lo es la cola, la cual levantan de forma recta, abren la boca y suelen hacer maullidos fuertes tratando de intimidar.
Cuando detectes estas conductas debes ser precavido. Un gato molesto puede ser agresivo y puede atacar en cualquier momento. Mantén una distancia prudente y evita que se acerquen otras personas.
El lenguaje corporal de un gato contento o alegre
Un gato contento es menos evidente, pues puede tener varias variaciones. Puede estar juguetón, relajado, aburrido, curioso o estar sintiendo placer. Esto puede indicar que tiene ganas de socializar o de relacionarse con sus amos o con otros animales. La mayoría de los gatos cuando están felices adoptan posturas relajadas, más que todo echado y con la cola moviéndose.
Si esta en movimiento, suele tener un andar estirado, con pasos largos pero sin mucha prisa. Si acaricias a un gato cuando está contento posiblemente cierre los ojos en señal de tranquilidad, confianza y placer. Otro indicio es el ronroneo, muchos expertos indican que se debe a la propia sensación de placer.
El lenguaje corporal de un gato estresado o asustado
Si tu gato se estresa puede ser porque está percibiendo algún tipo de amenaza desconocida. Cuando un gato se estresa, podemos observar que su andar es cuidadoso y tenso, con la cola levantada y ligeramente doblada en el extremo. La mirada de un gato estresado es firme, con los ojos bien abiertos y las orejas hacia adelante.
También, si un gato está inseguro, adoptará estas posturas. Un gato pasa a este estado luego de estar molesto y que sus señales no le sirvieran para intimidar. Entonces, el felino buscará huir o esconderse por lo que se le verá muy agitado.
A continuación una tabla de las distintas posturas de su cola y su explicación:
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Un saludo Gatuiteros! Anabel
